Es lo malo que tienen las modas, que luego salen copias y réplicas por todos sitios. Es como las setas, se reproducen por esporas, de la noche a la mañana todo está inundado de ese concepto.

Primero pasó con las tiendas de yogur helado, después con los cigarrillos electrónicos, los de vapor. Y ahora ocurre con algo más intangible como es todo eso que tiene que ver con pensamiento lateral, desing thinking, procesos creativos, etc…

Resumiendo mucho estos conceptos son muy similares entre ellos, y se centran en un concepto. Generar ideas o respuestas que se salen del cauce natural del pensamiento lógico o habitual de las personas. Creatividad aplicada.

Realmente esto aplicado para empresas y en el mundo laboral es una herramienta realmente potente y necesaria para muchísimas cosas, pero principalmente el objetivo final que se consigue en la empresa es, mejorar rendimientos, reducir costes y resolver problemas intrínsecos.

La creatividad y el “pensamiento lateral” se puede aplicar a cualquier área, desde recursos humanos para hacer detección de talentos y procesos de selección más eficientes hasta en formación. Cuantas veces la formación interna de los trabajadores es el punto débil de una empresa y de lo más odiado por trabajadores.

Esto puede cambiarse trabajando la creatividad en estas áreas. ¿Te imaginas aprender riesgos laborales con un pase de modelos en clase? ¿O hacer un concurso de karaoke para desarrollar temarios legales?

Esto es un ejemplo de cosas que podemos hacer en una empresa si quieres que colaboremos juntos para mejorar. Pero no voy a darme más autobombo, la persona que quiera más información que se ponga en contacto.

Vuelvo por donde iba. La proliferación sin control de setas y humo entorno a la creatividad, innovación, pensamiento lateral, y cualquiera de esos nombres que se le dan. Sin matarse mucho, se pueden encontrar páginas y páginas de Internet de “expertos” que venden sus “ejercicios” para desarrollar tus capacidades dentro de estos campos. No voy a copiar de otra página para que nadie se sienta atacado pero acertijos del tipo: ¿Cuántos meses tienen 30 días? No implica tener nada de pensamiento lateral, ni creatividad para descubrir la respuesta. Juguemos. Para de leer aquí para hacer tu propuesta de solución gracias al “design thinking”.

Ok, tu respuesta ha sido 4, o si ponemos los nombres ordenados son Abril, Junio, Septiembre y Noviembre. ¿He acertado? Espero que no. Porque la respuesta correcta son 11 meses. Exactamente todos menos Febrero, ya que los meses de 31 día, también tienen 30. Para llegar a esta conclusión no es necesario aplicar complejos procesos creativos ni cosas similares, es solo tener comprensión lectora y ceñirte a lo que se pregunta. Vale, y no dejarte llevar por la respuesta inmediata.

Ahora vayamos a un verdadero ejercicio que te hará poner todo tu potencial creativo a funcionar.

Y como me gusta mojarme, me comprometo a revisar tu respuesta si quieres y comentarla en privado.

La premisa es: Diseñar unas gafas, pero no puedes usar la nariz ni las orejas para que se sujeten. Poner las neuronas a trabajar 😉

Si alguien quiere hacer este ejercicio, ¡adelante! Y si una vez hecho quieres recibir un feedback por parte mía no hay problema, contacta conmigo a través del correo, y te respondo con lo que me parece tu propuesta 😉