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Miedo a la innovación

El miedo a la innovación, a los cambios, a lo nuevo siempre existe. Es más, es obligatorio que exista, solo así podemos saber qué es innovación y qué no.

miedo innovacion, 3 pies
Jack Fotografia

Pero hay diferentes miedos a lo nuevo. Miedo al hecho en si por el cambio que introduce, y miedo cuando se innovación sin control.

El primero de los miedos que he comentado es natural. Dentro de todas las personas hay miedos a ciertos cambios o si no miedo, digamos tensión por la incertidumbre que genera el futuro cambio. Esas inseguridades si se aliñan con desinformación o desconocimiento sobre como funciona la innovación puede generar situaciones que desencadenan el segundo miedo en las personas.

El miedo a la innovación sin control. La innovación aunque no lo parezca siempre está reglada y tiene que someterse a protocolos, marcos normativos y fases de pruebas.

Uno de los ejemplos más claros puede ser las innovaciones médicas o sanitarias. Recorren un gran camino desde que se inicia en una propuesta en papel (o correo electrónico) hasta que llega a las manos del gran público o este ve sus efectos. Sin embargo, en otras áreas que se debe realizar igual o tienen tiempos más dilatados para comprobar los efectos, a nivel general la mayoría de personas no entienden que haya que realizar estos pasos. En cuanto al tema de las normas, es algo tan necesario como que exista una mínima seguridad para que por ejemplo, un conductor o conductora de un autobús urbano, no pueda despertarse un día con la gran idea de innovar en el servicio de transporte público y decida cambiar el trayecto de la línea en la que trabaja. No es exactamente así, pero esto ocurre más de lo que pensamos. A raíz de esto luego generan conflictos y mal entendidos. Si quieres innovar en tu área, primero estudia que normativas y que requisitos tienes que cumplir para no generar problemas. Es un consejo.

Volviendo al tema, por desgracia, este tipo de cosas no las entiende todo el mundo, por ello, de vez en cuando es fácil ver que la innovación se convierte en arma política arrojadiza.

Hablo del típico comentario del tipo: “En tal país se hace tal cosa de esta otra forma y les está dando mejores resultados, nosotros somos unos ineptos porque no lo copiamos”. El miedo a la innovación del que hablo se esconde precisamente en esta frase. Las innovaciones se corresponden con una serie de circunstancias que producen que esa solución sea mejor o se pueda implementar. Si no se dan esas mismas circunstancias en el otro lugar donde se quiera implementar es totalmente seguro que no vaya a funcionar igual. Pero claro, este concepto de que tienen que darse las mismas circunstancias es lo que no ven cuando se quiere copiar algo.

La innovación en cualquier campo produce una mejora o un beneficio a cambio de una desventaja o perjuicio (un precio). No es gratis, o si, entendiéndolo como ya dije una vez (leer entrada sobre el concepto gratis) Cuando quieres cambiar algo e implementar innovación ¿Conoces el precio que tienes pagar? Y en segundo lugar, ¿Estás dispuesto a pagar ese precio a cambio de esa innovación? ¿y tienes para pagarlo? Cuando tienes la respuesta a estas tres preguntas, es cuando has vencido el miedo a la innovación, porque en el momento que puedes responder a las tres preguntas es cuando tienes la suficiente información sobre dicha innovación. En realidad, no solo de la innovación, también sobre cualquier cosa que se te ocurra. Cuando tienes toda la información real sobre una idea o un concepto es cuando puedes tomar decisiones acerca de esa idea o concepto.

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